¿Qué son los objetivos de desarrollo personal? 10 ejemplos y cómo establecerlos

Los objetivos de desarrollo personal pueden ayudar a los empleados a desarrollar sus habilidades. Las nuevas habilidades no se limitarán a su vida personal; tienen un efecto indirecto. El individuo se convertirá en mejor persona y le ayudará a convertirse en mejor empleado en el lugar de trabajo.

Pero, ¿qué objetivos de desarrollo personal aportan mayores beneficios? ¿Y cómo pueden establecerlos los empleados y ayudarles a lograrlos los empleadores? Estas y otras preguntas se abordarán en este artículo.

En primer lugar, comencemos por analizar qué son los objetivos de desarrollo personal.

¿Qué son los objetivos de desarrollo personal?

Los objetivos de desarrollo personal son metas que las personas se fijan a sí mismas. Una vez alcanzados, estos objetivos pueden beneficiar a la vida personal del individuo, mejorando su salud, bienestar y felicidad.

10 ejemplos de objetivos de desarrollo personal

Hay cientos de objetivos de desarrollo personal que las personas pueden fijarse. Los diez siguientes proporcionarán grandes recompensas a quienes los logren.

Construir mejores relaciones

Ninguna persona es una isla. Por mucho talento que tenga, necesita relaciones positivas para ser feliz. Teniendo esto en cuenta, uno de los primeros objetivos de desarrollo personal que debe fijarse un empleado es mejorar sus relaciones, tanto personales como profesionales.

El empleado debe enfocarse en la escucha activa en las conversaciones y en cómo hacer mejores preguntas. Estas habilidades le ayudarán a crear relaciones más sólidas y de mayor confianza con las personas que le rodean.

Tener confianza en uno mismo

La confianza desempeña un papel fundamental en varios aspectos de la vida de una persona. Afecta a la mayoría de las cosas, desde entablar relaciones con personas significativas hasta pedir un ascenso o afrontar positivamente una entrevista de trabajo.

Así que no es de extrañar que la confianza sea un objetivo prioritario de desarrollo personal para los empleados.

Desarrollar valentía venciendo al miedo

La valentía es el valor que posibilita todos los demás valores. Una persona valiente puede defender lo que considera correcto: sus valores. Enfrentarse a los miedos es una tarea difícil para cualquiera, pero es la forma más eficaz de desarrollar valentía.

Para inspirarse, los empleados pueden fijarse en una iniciativa llamada "100 días de rechazo". Jia Jiang empezó este proyecto pidiéndole favores a la gente, esperando ser rechazado. Lo hizo para ser más valiente y los resultados fueron sorprendentes (incluso voló un autogiro).

Trabajar en la inteligencia emocional

La inteligencia emocional es vital tanto en la vida personal como en el trabajo, lo que la convierte en un buen objetivo de desarrollo personal.

Con una mayor inteligencia emocional, los individuos serán capaces de "leer" mejor las emociones, ser más empáticos y aprender a comunicar sus emociones con eficacia. Todas estas habilidades son inmensamente valiosas en la vida personal y también ayudarán a crear mejores empleados.

Crear nuevos hábitos

La motivación solo puede durar un tiempo, y por eso las personas deben invertir esa motivación en crear nuevos hábitos.

Un hábito es automático; no pensamos necesariamente en hacerlo. Hay hábitos saludables que los individuos pueden adquirir y que les ayudarán a ser mejores personas, como leer, ser generoso o agradecido, o escuchar primero antes de hablar.

Con los hábitos, se trata de empezar poco a poco y luego ir aumentando. Los resultados no se obtienen haciéndolo una o dos veces, sino con regularidad.

Mejorar la productividad

Los empleados pueden fijarse un objetivo de desarrollo personal para aumentar su productividad, tanto en el ámbito personal como en el profesional. Mejorar la productividad no significa aumentar las horas de trabajo, sino ayudar al empleado a gestionar sus tareas y objetivos de manera más eficiente y eficaz.

Además, los empleados aprenderán a gestionar mejor su tiempo. Sabrán qué proyectos emprender y cuánto tiempo necesitarán para ellos. Y lo mejor es que ser más productivo ayudará a las personas a alcanzar todos sus demás objetivos de desarrollo personal.

Leer libros

Basura entra, basura sale. Si una persona no se alimenta de buena información, no podrá producir cosas de calidad. Por eso no es de extrañar que la lectura de libros sea un objetivo de desarrollo personal muy popular.

Leer libros nuevos (y viejos) ayudará al individuo a aprender cosas que puede utilizar en su vida personal y profesional. Los libros ayudan a las personas a ser más creativas, informadas y orientadas a la búsqueda de soluciones. Los empleados deben empezar despacio y fijarse un objetivo diario para la lectura de sus libros, e ir aumentando a partir de ahí. Con solo leer 20 páginas al día, la persona puede leer entre 40 y 50 libros al año.

Aprender a manejar el estrés

Hay mucho estrés en la vida diaria de todos los empleados. Ese estrés no cesa cuando termina el trabajo; los empleados se lo llevan a casa y les sigue carcomiendo. Es imposible desconectar a las 5 de la tarde, sobre todo en un mundo en el que el trabajo remoto difumina la línea que separa el trabajo de la vida.

Por lo tanto, los individuos pueden fijarse como objetivo de desarrollo personal aprender a manejar mejor el estrés. La gestión del estrés ayudará al empleado a evitar el agotamiento y a afrontar tareas difíciles en el trabajo y situaciones complicadas en la vida.

Atención plena y presencia

Con tantas cosas sucediendo al mismo tiempo, cada vez es más difícil permanecer en el momento. Siempre miramos al futuro, preguntándonos qué ocurrirá a continuación y corriendo a hacer la siguiente tarea.

Practicar la atención plena y la presencia puede ser un objetivo beneficioso para el desarrollo personal. Ayudan a las personas a permanecer en el momento, lo que les permite enfocarse en sus tareas actuales sin distraerse. No solo eso, sino que los empleados que practican la atención plena pueden encontrar maneras de agradecer las cosas pequeñas que ocurren a su alrededor, lo que reduce sus niveles de estrés.

Mejora de la toma de decisiones

La toma de decisiones es una habilidad que todo individuo puede aprender. Hay distintos niveles de toma de decisiones:

• Emocional

• Lógica

• Basada en valores

Una persona puede fijarse como objetivo de desarrollo personal pasar de una toma de decisiones más emocional a una toma de decisiones más basada en valores. La toma de decisiones emocional se produce cuando los empleados dejan que sus emociones dicten sus decisiones, de modo que simplemente hacen lo que quieren. Esto puede ser destructivo para el individuo.

La toma de decisiones basada en valores, en cambio, es una forma superior porque el individuo basa sus decisiones en sus valores más arraigados. En consecuencia, las decisiones que tome reforzarán los valores fundamentales de su vida.

La fuerza de los objetivos de desarrollo personal

Los objetivos de desarrollo personal suelen tener efectos positivos en todos los individuos. Para ayudar a tus empleados a alcanzar sus objetivos de desarrollo personal, puedes darles ideas sobre objetivos alcanzables, incluyendo un punto de partida y un punto final.

Ofréceles también una evaluación de habilidades cuando empiecen su camino para valorar su "forma base". Cuando alcancen sus objetivos de desarrollo personal, puedes darles más pruebas de habilidades para ver cuánto han evolucionado en el transcurso del viaje.

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